lunes, 9 de abril de 2012

El ónix


Ahora quiero que me acompañen a la Presa Santa Rosa, entre Zacatecas y Jalisco porque estoy buscando ónix negro, lo cual no es muy difícil porque los lugareños saben localizarlo muy bien. Es muy común que la gente encuentre y coleccione el ónix, ónice de mármol u ónix calcáreo, aunque hay otros que lo hace a un lado en el camino; por ejemplo, vi en la región de Tequila a unos agabveros que aventaban el ónix porque lo consideran un estorbo para las pencas. Imagínense a Jalisco sin buen tequila, no sería el mismo; entonces ayudé a los agaveros a quitar las piedras. En Brasil se puede caminar en medio de la selva y de repente hallar estas ágatas, pero ahí sí necesitamos guías expertos porque la fauna en Governador Valadares puede ser muy peligrosa. El ónix se origina por la acumulación de gases volcánicos y en México hay grandes zonas volcánicas, por eso es abundante y es considerado una piedra semipreciosa.
            La calidad de ónix depende de su pulido. La mayoría de la gente cree que solo hay de color negro, pero también podemos conseguir verde, café, rojizo, blanquecino, grisáceo. Al ónix rojo, marrón y blanco se les conoce como sardónice.  En joyería y artículos de decoración es muy utilizado por la calidad de su pulido. Es una piedra opaca y generalmente es cortada en forma circular y delgada, lo que llamamos cabuchón o cabujón.
            La palabra ónix procede del griego y significa uña. El mito cuenta que Cupido le cortó las uñas a Venus con una de sus flechas, mientras la diosa dormía. Cupido dejó los trocitos de uñas por el prado y las divinidades los convirtieron en piedra para que se conservaran como parte valiosa del cuerpo de Venus. Algunos creen que portar algún dije de ónix permitirá fortalecer la conciencia de uno mismo, al tiempo de estar permanentemente protegidos. Recomiendan esta piedra a los signos de Leo y Capricornio que rige diciembre, al chakra del Plexo Solar y al del Tercer ojo y en la Antigüedad se le consideraba la piedra de los deseos, que permite la disciplina, la concentración y la razón. Yo ahora me voy concentrar con el poder del ónix y voy a empezar a pulir para checar un poco su calidad.
            Mañana voy a recolectar ónix verde.